La causa judicial se inició tras la denuncia formulada por CAPA, en mayo de 2013, contra el responsable de un sitio web que ofertaba y comercializaba equipos de diagnosis pirateados y falsificados.
La indicada denuncia motivó el inicio de una investigación policial en la que participaron miembros de los Grupos de Propiedad Intelectual e Industrial y de Investigación Tecnológica de las Brigadas Provinciales de la Policía Judicial de Barcelona y Castellón, respectivamente, que culminó con una redada en el domicilio particular del responsable de dicha página web, ordenada judicialmente.
En este operativo, realizado en febrero de 2014, se intervinieron
80 equipos de diagnosis falsificados, así como diversos juegos de cableado,
cds, dvds, tarjetas de memoria, ordenadores, placas electrónicas y lectores de llaves para vehículos, así como documentación bancaria y tarjetas vinculadas con la presunta actividad delictiva.
El examen de la documentación intervenida ha motivado ahora la imputación de los responsables de numerosos talleres que adquirieron equipos falsificados, encontrándose el procedimiento en su fase instructora para valorar si hay indicios de criminalidad en su conducta.